Visiones de Carmen Cuervo
Mis ojos miraban en hora de ensueños la página blanca. Y vino el desfile de ensueños y sombras. Y fueron mujeres de rostros de estatua, mujeres de rostros de estatuas de mármol, ¡Tan tristes, tan dulces, tan suaves, tan pálidas!
Rubén Darío
Publicar un comentario
No hay comentarios:
Publicar un comentario